Solucionador de matrimonios (ePub)

DESCRIPCIÓN
Hay algunos números bastante pesados y deplorables sobre las relaciones que no han funcionado, si bien es cierto que si se hubiera utilizado un poco más de esfuerzo y comprensión, estas relaciones podrían haber funcionado asombrosamente bien.

La intención de este libro electrónico es mostrar qué reparaciones podrían haber sido posibles en las relaciones que se deterioraron y revelar que con un esfuerzo más considerado, muchas de nuestras relaciones podrían cambiar en la dirección correcta.

Este libro electrónico le muestra que los hombres y las mujeres son fundamentalmente diferentes y debemos comprender y aceptar estas diferencias. Necesitamos entender que hay cosas diferentes que buscamos en la vida, e incluso en una relación, hay cosas diferentes que un hombre y una mujer buscan el uno en el otro. Si se tiene en cuenta esta ley fundamental de la naturaleza, ambos géneros podrían vivir en mejor armonía entre sí. Al darnos cuenta de nuestras diferencias, estaríamos en mejores condiciones para convertirnos en un todo unificado.

Los basicos

Se necesita tiempo y esfuerzo, pero, lo más importante, se necesita mucha madurez y comprensión. Si aceptamos estas diferencias en nuestros socios, tendremos relaciones más significativas. Con este eBook, no estamos tratando de decirte que cambies en qué te ha hecho la naturaleza - eso no va a suceder - pero es necesario que te des cuenta de que tu pareja es una persona diferente. No es necesario que les gusten las mismas cosas que tú haces y digan las mismas cosas que tú hablas.

Al mismo tiempo, la mayoría de las cosas que etiquetamos como egoístas y desconsideradas en nuestros socios, en realidad son bastante diferentes de lo que parecen. Estas cosas no son más que los rasgos fundamentales de esas personas. Están diseñados para comportarse de esa manera particular. Si un hombre olvida el cumpleaños de su esposa, no es porque no la quiera, es porque la naturaleza lo ha diseñado para que se concentre en un trabajo a la vez.

Tal vez estaba demasiado ocupado con otra cosa, su mente estaba biológicamente desviada a esa tarea por completo y cometió un desliz. O, cuando una mujer pasa demasiado tiempo cuidando de sí misma, el hombre no debe pensar que está siendo vanidosa. La naturaleza ha diseñado a las mujeres de tal manera que les gusta cuidar su apariencia.

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